Un pequeño paso para un campesino, un gran paso para el agro.
IPE. Instituto Peruano de Economía.
Martes 12 de Octubre de 2010.
http://ipe.org.pe/?p=15041
IPE. Instituto Peruano de Economía.
www.ipe.org.pe
12 de Octubre de 2010
Comentario Diario
Un pequeño paso para un campesino, un gran paso para el agro.
De 800 postulaciones, el proyecto agrícola peruano Sierra Productiva quedó entre los 12 finalistas del concurso internacional The World Challenge, convocado por la BBC de Londres, junto con la revista Newsweek y auspiciado por Shell. (El Comercio, 01/10/2010)
No es ninguna novedad que en el Perú existen distintas visiones del desarrollo y varias maneras de concebir el progreso. En ningún otro sector se hace esto más evidente que en el agro. Si bien hay quienes creen que a los campesinos hay que subvencionarlos eternamente para que puedan mantener una forma de vida que no sería autosostenible -lo cual a través de las décadas no ha dado buenos resultados (CD 20/09/2010)-, para otros el futuro se encuentra en transformar las condiciones que llevan a que los campesinos tengan una baja productividad. Esto se lograría, transfiriendo tecnología de tal manera que los agricultores puedan aumentar sus ingresos, para salir permanentemente de la pobreza por su propio esfuerzo.
A nuestro entender, ningún otro proyecto público o privado plasma este concepto de transferencia de tecnología a campesinos mejor que Sierra Productiva. En la presentación La revolución productiva de la sierra peruana de su promotor principal, Carlos Paredes, se puede acceder a la información básica con respecto a esta iniciativa. No se trata de la transferencia de tecnologías muy elaboradas o sofisticadas, sino por el contrario, de elementos fáciles de replicar y relativamente baratos que son suficientes como para potenciar el trabajo e integrar económicamente a los campesinos que participan. Se han identificado 18 tecnologías que se aplican a varios procesos productivos.
Estas tecnologías están agrupadas en tres módulos que cada familia implementa secuencialmente. El apoyo externo necesario para el módulo I está valorado en S/.1,100 y el apoyo para los módulos II y III está valorados en S/.6,000. Los partícipes también tienen que poner de su parte, valorando su trabajo, S/.2,400 para el módulo I y S/.4,300 para los módulos II y III. Esto quizás le caiga como un baldazo de agua fría a los que postulan que a los campesinos en el Perú hay que regalarles todo y protegerlos de las condiciones del mercado. Pero el esfuerzo parece estar funcionando ya que incluso con el aporte que tienen que hacer las familias participantes, Sierra Productiva ya ha incorporado más de 30,000 familias de bajos ingresos en varias regiones del Perú.
Otro detalle importante de Sierra Productiva es que no solamente se preocupa por incrementar la productividad a corto plazo, sino que incide en temas de seguridad alimentaria, nutrición y educación, así como acceso al mercado en mejores condiciones, promoviendo así que generación tras generación las familias involucradas puedan alcanzar mayores niveles de bienestar. Una visión que ha tenido excelentes resultados y que debería ser una excelente lección para quienes, por el contrario, postulan que los campesinos están mejor si se les aísla de la economía nacional.
Si bien la propuesta parece impecable, pensamos que Sierra Productiva tiene una pata coja que habría que atender lo antes posible. Si bien cuenta con información de cómo la situación de los participantes ha mejorado sorprendentemente (reducción de hasta 48% de la desnutrición crónica, incremento del ingreso de entre S/.80 y S/.200 mensuales a ingresos de entre S/.300 y S/.500 en apenas un año, etc.), no existe suficiente detalle y análisis como para determinar y cuantificar claramente los factores de éxito y las condiciones para la replicabilidad del programa a gran escala. Es necesario definir una línea base y un seguimiento riguroso que permita este análisis.
Por todo esto vale la pena votar por Sierra Productiva en el concurso organizado por la BBC en este enlace, además de apoyar para que pueda seguir creciendo y llegando a la mayor cantidad de familias campesinas con una propuesta que incorpora constantemente más conocimiento derivado de la realidad de nuestro mercado.
No es ninguna novedad que en el Perú existen distintas visiones del desarrollo y varias maneras de concebir el progreso. En ningún otro sector se hace esto más evidente que en el agro. Si bien hay quienes creen que a los campesinos hay que subvencionarlos eternamente para que puedan mantener una forma de vida que no sería autosostenible -lo cual a través de las décadas no ha dado buenos resultados (CD 20/09/2010)-, para otros el futuro se encuentra en transformar las condiciones que llevan a que los campesinos tengan una baja productividad. Esto se lograría, transfiriendo tecnología de tal manera que los agricultores puedan aumentar sus ingresos, para salir permanentemente de la pobreza por su propio esfuerzo.
A nuestro entender, ningún otro proyecto público o privado plasma este concepto de transferencia de tecnología a campesinos mejor que Sierra Productiva. En la presentación La revolución productiva de la sierra peruana de su promotor principal, Carlos Paredes, se puede acceder a la información básica con respecto a esta iniciativa. No se trata de la transferencia de tecnologías muy elaboradas o sofisticadas, sino por el contrario, de elementos fáciles de replicar y relativamente baratos que son suficientes como para potenciar el trabajo e integrar económicamente a los campesinos que participan. Se han identificado 18 tecnologías que se aplican a varios procesos productivos.
Estas tecnologías están agrupadas en tres módulos que cada familia implementa secuencialmente. El apoyo externo necesario para el módulo I está valorado en S/.1,100 y el apoyo para los módulos II y III está valorados en S/.6,000. Los partícipes también tienen que poner de su parte, valorando su trabajo, S/.2,400 para el módulo I y S/.4,300 para los módulos II y III. Esto quizás le caiga como un baldazo de agua fría a los que postulan que a los campesinos en el Perú hay que regalarles todo y protegerlos de las condiciones del mercado. Pero el esfuerzo parece estar funcionando ya que incluso con el aporte que tienen que hacer las familias participantes, Sierra Productiva ya ha incorporado más de 30,000 familias de bajos ingresos en varias regiones del Perú.
Otro detalle importante de Sierra Productiva es que no solamente se preocupa por incrementar la productividad a corto plazo, sino que incide en temas de seguridad alimentaria, nutrición y educación, así como acceso al mercado en mejores condiciones, promoviendo así que generación tras generación las familias involucradas puedan alcanzar mayores niveles de bienestar. Una visión que ha tenido excelentes resultados y que debería ser una excelente lección para quienes, por el contrario, postulan que los campesinos están mejor si se les aísla de la economía nacional.
Si bien la propuesta parece impecable, pensamos que Sierra Productiva tiene una pata coja que habría que atender lo antes posible. Si bien cuenta con información de cómo la situación de los participantes ha mejorado sorprendentemente (reducción de hasta 48% de la desnutrición crónica, incremento del ingreso de entre S/.80 y S/.200 mensuales a ingresos de entre S/.300 y S/.500 en apenas un año, etc.), no existe suficiente detalle y análisis como para determinar y cuantificar claramente los factores de éxito y las condiciones para la replicabilidad del programa a gran escala. Es necesario definir una línea base y un seguimiento riguroso que permita este análisis.
Por todo esto vale la pena votar por Sierra Productiva en el concurso organizado por la BBC en este enlace, además de apoyar para que pueda seguir creciendo y llegando a la mayor cantidad de familias campesinas con una propuesta que incorpora constantemente más conocimiento derivado de la realidad de nuestro mercado.
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